Nuestro espacio propone COMUNICAR a través de la simpleza formal un CALMA constante que le permita al usuario convertirse por un instante en OBSERVADOR.

La intención de los profesionales es destacar cada uno de los elementos que el espacio original nos regalo al entrar; tanto la caja racionalista de la arquitectura del edificio como el imponente mural de Benito Quinquela Martin pintado por el artista in situ.

La arquitectura nos otorga un espacio en doble altura con una lucarna casetonada que baña cada uno de los rincones del espacio, junto a un balconeo perimetral que nos permite dialogar entre las dos plantas.

Dichos elementos sumados al arte original es lo que tomamos como punto de partida para nuestro diseño.

Buscamos trabajar los dos niveles como elementos diferentes, planteando la planta baja funcional como un espacio TOTAL BLACK que lleve invite al usuario-espectador a sumergirse en la paleta cromática del mural.

El proyecto plantea cubrir las superficies tanto horizontal como vertical del espacio en una madera negra con beta a la vista buscando continuidad entre los planos y planteando una reminiscencia a la continuidad material en la arquitectura racionalista.

De este modo se reserva la planta alta como espacio TOTAL WHITE, que completado por diseños lumínicos bañan las paredes de un blanco dinámico convirtiendo al en espacio aéreo en un gran volumen de luz.

La función del espacio es planteada bajo el mismo concepto de simpleza.

Para ello se plantearon distintos sectores de permanencia que sin invadir el espacio de circulación abraza a un gran cantero central que buscar empatar la morfológica de la lucarna original, generando un dialogo entre la luz y el verde.

Paralelos a dos de los lados del volumen central y encastrándose en la estructura original se propusieron dos placas / asientos de doble acceso que acompañan la dirección visual hacia el mural.

Perpendiculares a ellos y en paralelo al mural se busca general dos espacios diferente, junto al paso al foyer se sitúa otro espacio lineal de permanencia que hace a su vez de pantalla y marca la circulación de exposición; mientras que frente al mural lo que busco es generar un sector contemplativo que acompaña a la muestra con una butaca de reminiscencia racionalista en los mismos tonos del espacio.

Por ultimo se busca separar del espacio central el área barra – expendiendo propiamente dicha para lo cual se retrotrae una gran barra en piedra negra que se sumerge en una caja racionalista totalmente oscura que se completa con una pantalla tipo biombo construida en back light.