Dos muebles de melamina clara enmarcan los bordes de la cocina del Espacio N° 3, de la arq. Viviana Melamed. El equipamiento panelizado marca tendencia en las cocinas integradas para ocultar en el amoblamiento la heladera y otros artefactos.
En ambos casos, la mesa de comedor separa la cocina del estar con una ubicación protagónica. El circuito funcional de la cocina se organiza sobre un lateral y, con el equipamiento panelizado, todo queda resuelto en un gran mueble que forma parte del living.
A su vez, el Espacio N°5 Unidad de vivienda, del arq. Hugo Gallego y la dis. Pamela Martos, le suma un aire tecnológico a la funcionalidad y flexibilidad de su propuesta. En este caso, la cocina queda totalmente oculta tras paneles negros de alto brillo que los autores relacionan con el reflejo de las pantallas de los dispositivos que nos atrapan.
Las cocinas forman parte de un gran ambiente social.
La pileta de formato cuadrado (Johnson Acero Quadra) amplía el espacio útil de la mesada.
Baños en escena
“Nuestra premisa es encontrar la esencia de cada proyecto, brindar experiencias únicas para cada encargo, con mirada propia y permanencia en el tiempo. No nos regimos por las modas, ni nos encasillamos en ciertos estilos”, aclaran Lauferman y De Angelo. Eligieron representar el espíritu del Delta en todo el departamento, el Espacio N°4. Los tonos ocres y marrones vinculados con la naturaleza en las paredes contrastan con colores vibrantes que destacan el mobiliario y objetos. El toilette comparte el mismo tono creme brulee de las paredes del estar para crear continuidad. Con la misma idea, comparte el piso de madera con el resto de la vivienda.
El baño principal se impone por contraste. En una caja tomada por el negro se destacan los artefactos de líneas netas y diseño moderno. La iluminación completa una puesta escenográfica en el área del espejo.
Fotos: Gentileza Casa FOA/@estudioressio
